La mayoría de las personas ya han oído hablar de la endometriosis. Pero, ¿qué es la adenomiosis? ¿Cuáles son sus síntomas más característicos? ¿Y cuál es la relación entre esta esta condición ginecológica con las reglas abundantes?
- ¿Qué es la adenomiosis?
La adenomiosis es una afección en la que las células del revestimiento de la matriz (endometrio) crecen en la pared muscular del útero (miometrio). Debido a que estas células sangran durante la menstruación, se forman “montículos” llenos de sangre antigua en la pared muscular[i].
Un área más grande de estos “montículos” en el tejido muscular se llama adenomioma. Un adenomioma se parece un poco a un mioma, pero los miomas están formados por tejido muscular1.
- ¿Cuál es la diferencia con la endometriosis?
La adenomiosis también se conoce como “endometriosis interna”. Este es un término algo confuso, porque la endometriosis involucra tejido que se asemeja al endometrio. La endometriosis causa sangrado interno e inflamación y eso puede causar todo tipo de molestias, como dolor menstrual severo y pérdida abundante de sangre menstrual. La adenomiosis puede verse como una forma de endometriosis, pero hay diferencias.[ii]
- ¿Cuáles son los síntomas de la adenomiosis?
Los períodos abundantes, dolorosos e irregulares son el principal síntoma de la adenomiosis. El dolor en el área pélvica y el dolor antes de su período también son síntomas característicos. Algunas mujeres con adenomiosis tienen dolor durante el sexo (durante la penetración)2.
- ¿Se puede tener endometriosis y adenomiosis?
La propia adenomiosis puede ser clasificada como endometriosis interna. Por lo que es posible presentar endometriosis interna (adenomiosis) y endometriosis externa (normalmente denominada endometriosis)1.
- ¿Cómo se desarrolla la adenomiosis?
Aún se desconoce, aunque existen varias teorías. Una de ellas establece que, por ejemplo, algo sale mal cuando el endometrio intenta repararse a sí mismo después de un daño. Además, para el mantenimiento de la adenomiosis en el tiempo pueden ser necesarios altos niveles de estrógenos y poco control del crecimiento endometrial en el miometrio1.
- ¿Podría estar en mayor riesgo de adenomiosis?
Cualquier mujer en edad fértil puede tener o contraer adenomiosis. La afección se detecta con mayor frecuencia en mujeres entre los 40 y 50 años con hijos y en mujeres con endometriosis y/o problemas de fertilidad2,[iii]. Las excepciones confirman la regla: la adenomiosis a veces también se detecta en mujeres jóvenes[iv]. Las opiniones difieren sobre cuántas mujeres tienen endometriosis. Se estima que la adenomiosis es una enfermedad ginecológica benigna que afecta entre el 5-70% de las mujeres en edad fértil. Alrededor del 30% de ellas no lo notan. Así como los miomas no siempre tienen que causar molestias.[v]
- ¿Cuáles son los factores de riesgo?
La adenomiosis parece dificultar las posibilidades de embarazo. Algunos estudios han demostrado que disminuye las tasas de embarazo y aumenta las de aborto. También hay indicios de que la adenomiosis provoca que la implantación exitosa del óvulo fertilizado en el endometrio sea más difícil. En este sentido, la adenomiosis puede tener un efecto negativo en la fertilidad3.
- ¿Cómo se lleva a cabo el diagnóstico?
El ginecólogo puede determinar si hay adenomiosis con una ecografía vaginal o con una resonancia magnética. Pese a esto, en muchos casos el diagnóstico no se realiza hasta que el útero es examinado por un patólogo después de una histerectomía (extirpación uterina)3.
- ¿Qué opciones de tratamiento existen?
Las opciones de tratamiento dependen de las circunstancias de cada persona. Al igual que con muchas afecciones ginecológicas, la terapia hormonal es la primera opción de tratamiento3.. A las mujeres que desean tener hijos o a las mujeres que por otras razones no quieren anticonceptivos hormonales, se les recetan analgésicos.
No hay medicamentos que curen la adenomiosis. De tal forma que, una vez que dejas de tomar el fármaco, los síntomas regresan. Las opciones de tratamiento más agresivas son la extirpación del adenomioma, por ejemplo, mediante una histeroscopia terapéutica (operación a través de un tubo de visualización) o la embolización (cierre de los vasos sanguíneos que causan problemas). Una histerectomía es también una opción, pero, en combinación con la endometriosis, puede ser una operación muy difícil técnicamente1.
- ¿Es siempre necesario el tratamiento?
Depende de la gravedad de los síntomas. No tienes que notar que padeces adenomiosis. Si hay molestias, en la mayoría de los casos desaparecen automáticamente cuando ya no tienes un período menstrual; esto es, después de la menopausia.
Sin embargo, es importante que se realice el diagnóstico correcto para evitar riesgos innecesarios para la salud. Ciertos problemas derivados de adenomiosis, como la pérdida abundante de sangre menstrual y los períodos dolorosos, también pueden tener otras causas médicas. Es por eso que siempre es aconsejable someterse a un examen médico en caso de problemas ginecológicos.
MISC-08521-IBR-ES Rev.001 2022
[i] Gallo, J., Pérez-Herrezuelo, I., Díaz, M., Tirado, P., & Montoya, F. (2006). Adenomiosis: una afección uterina frecuente. Clínica E Investigación En Ginecología Y Obstetricia, 33(2), 59-63. doi: 10.1016/s0210-573x(06)74085-0
[ii] Womens, E. (2022). Adenomiosis: qué es y qué relación tiene con la endometriosis. Retrieved 23 June 2022, from https://www.womens.es/adenomiosis-que-es-y-que-relacion-tiene-con-la-endometriosis/
[iii] Villalba, D., Gómez, M., & Reus, R. (2022). ¿Qué es la adenomiosis uterina? – Riesgos, síntomas y tratamiento. Retrieved 5 September 2022, from https://www.reproduccionasistida.org/adenomiosis/#causas
[iv] Anemia por deficiencia de hierro – Diagnóstico y tratamiento – Mayo Clinic. (2022). Retrieved 5 September 2022, from https://www.mayoclinic.org/es-es/diseases-conditions/iron-deficiency-anemia/diagnosis-treatment/drc-20355040#:~:text=Hemoglobina.,g%2FdL%20en%20las%20mujeres.
[v] Alcalde, A., Martínez-Zamora, M., & Carmona, F. (2021). Adenomiosis. Una gran desconocida: ¿Qué debemos saber?. Clínica E Investigación En Ginecología Y Obstetricia, 48(2), 184-189. doi: 10.1016/j.gine.2020.08.007