Los métodos anticonceptivos hormonales contienen dos hormonas artificiales principales: progesterona y/o estrógenos, que impiden que el ovario libere óvulos y, por tanto, no haya posibilidad de embarazo[1]. Así, en el caso de métodos como las pastillas o el anillo, se usan durante tres semanas para que vayan liberando estas hormonas y, la cuarta se descansa. En esta cuarta semana, es en la que la mujer “menstrua”. Entrecomillamos este concepto porque en los días de descanso se produce un sangrado que, aunque popularmente se conozca como menstruación, no lo es[2].
En mujeres en edad reproductiva, cada mes el cuerpo se prepara para un posible embarazo; al no ser fecundado el óvulo que se ha producido, la capa funcional del endometrio se desprende dando lugar al sangrado vaginal. Pero, con el efecto anovulador de muchos métodos anticonceptivos, todo este proceso no se desarrolla.
Por este motivo, el sangrado que se produce en la semana que se deja de utilizar el método anticonceptivo seleccionado no es un sangrado menstrual al uso: se denomina ‘sangrado por deprivación’. Así, aunque no contiene el óvulo que se liberaría en un ciclo normal, el hecho de dejar de tomar estas hormonas durante unos días, provoca un pequeño desajuste que hace que el revestimiento del útero se desprenda, provocando un sangrado[3].
Además, este tipo de sangrado tiene unas características que lo diferencian de un sangrado dentro del ciclo menstrual. En concreto, este tipo de sangrado puede tener un color más claro y con una textura más ligera. Por otra parte, comparte rasgos con un sangrado menstrual, como que puede durar de 3 a 5 días o contener coágulos15.
Por otra parte, cabe destacar que el uso de anticonceptivos pude derivar en amenorrea o ausencia de regla. Esto no debe ser motivo de alarma puesto que, por los motivos expuestos anteriormente, al no ovular, en algunos casos el bajo contenido de estrógenos es insuficiente para estimular el crecimiento endometrial. Pero esta amenorrea no debe ser tomada como señal de alarma de que exista alguna patología ginecológica[4].
En definitiva, ante cualquier anomalía, ya sea un exceso o falta de sangrado, que pueda causar preocupación lo importante es acudir a la consulta médica, donde el profesional puede ofrecer información fiable de primera mano y ofrecer soluciones en caso de detectarse algún problema.
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[1] U.S. National Library of Medicine. (2022, October 1). Píldoras Anticonceptivas: Medlineplus Enciclopedia Médica. MedlinePlus. https://medlineplus.gov/spanish/ency/article/007460.htm
[2] De Almeida Rodríguez, A. (2022, September 12). Cómo Tomar Las pastillas Anticonceptivas. Tua Saúde. https://www.tuasaude.com/es/como-tomar-las-pastillas-anticonceptivas/
[3] ¿Qué es sangrado o hemorragia por deprivación?. Nosotras. (2023, May 19). https://www.nosotrasonline.com.co/entre-nosotras/cuidado-femenino/que-es-sangrado-o-hemorragia-por-deprivacion-nosotras-colombia/
[4] Pinkerton, J. V. (2023, January). Amenorrea – Ginecología y obstetricia. Manual MSD versión para profesionales. https://www.msdmanuals.com/es-es/professional/ginecolog%C3%ADa-y-obstetricia/anomal%C3%ADas-menstruales/amenorrea