Por lo general, el ciclo menstrual se completa entre 24 y 34 días, considerándose normal que el sangrado en cada periodo dure hasta 7 días[1]. En caso de que el sangrado se prolongue más allá de la semana, habría que explorar las razones de esta anomalía.
A pesar de que no sea lo habitual, no hay que alarmarse antes de acudir a la consulta médica. El especialista es quien podrá determinar cuáles son los motivos de este sangrado y si es una situación puntual o existe alguna condición ginecológica que lo motive. Para ello, el profesional realizará a la paciente una serie de preguntas, con el objetivo de conocer cómo son sus ciclos menstruales y desde cuándo se han presentado estos sangrados más extendidos en el tiempo. También pueden realizarse preguntas relativas al historial médico familiar por si hubiera antecedentes similares[2].
Más allá de las preguntas, el experto podrá realizar las pruebas y exploraciones pertinentes. Cabe destacar que, aunque las causas son diversas, se agrupan en dos grandes categorías: problemas hormonales o estructurales. En un número más reducido de casos, el sangrado inusualmente largo puede deberse a condiciones relacionadas con otras especialidades médicas, como trastornos relativos a la sangre, al riñón o la tiroides, entre otros[3].
Entre los problemas estructurales, las pruebas pueden dirigirse a conocer si la paciente tiene pólipos, miomas o alguna otra proliferación en el útero o en el cérvix. Por otra parte, los desajustes hormonales pueden generar estos sangrados anómalos, y los profesionales sanitarios deberán establecer el abordaje más adecuado en cada caso para regularizar los niveles y atajar este problema. Asimismo, en caso de que el problema sea relativo a otra especialidad, la paciente será derivada al servicio correspondiente para poder acabar con este sangrado abundante. Por último, el uso de determinados fármacos como puede ser la aspirina, deriva en ocasiones en sangrados más y los médicos pueden considerar terminar con el tratamiento si este fuera perjudicial para la paciente[4].
En cualquier caso, es importante saber que el sangrado menstrual abundante, ya sea en volumen o en tiempo, tiene solución. Para solventarlo, es esencial solicitar atención médica para determinar el problema en cada caso y poder así encontrar la solución más efectiva para cada paciente, teniendo en cuenta que existen diversas alternativas, cada vez más eficaces y menos invasivas8.
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[1] U.S. National Library of Medicine. (2022, October 11). Sangrado vaginal O uterino: Medlineplus Enciclopedia Médica. MedlinePlus. https://medlineplus.gov/spanish/ency/article/007496.htm
[2] Centers for Disease Control and Prevention. (2020, July 1). Sangrado Menstrual abundante. Centers for Disease Control and Prevention. https://www.cdc.gov/ncbddd/spanish/blooddisorders/women/menorrhagia.html#:~:text=Si%20usted%20tiene%20sangrados%20que,m%C3%A9dicos%20y%20sus%20ciclos%20menstruales.
[3] Jiménez Ubieto, I., Zornoza, A., & Tarrío, O.. (2009). Sangrado de origen ginecológico. Anales del Sistema Sanitario de Navarra, 32(Supl. 1), 39-48. Recuperado en 01 de junio de 2023, de http://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1137-66272009000200005&lng=es&tlng=es.
[4] Fernández Parra J, Álvarez López C, Martínez Morales S. Actualización del sangrado menstrual abundante. Prog Obstet Ginecol 2020;63(2):68-80.